El reconocimiento de una conducta de cohesión grupal comprometida en interventores y comunidad beneficiada, que permite discernir quiénes, cuándo, cómo y para qué deben integrar

Como principio rector en todas nuestras intervenciones, en el sentido de tener seguridad, firmeza, apertura, entrega y disposición a la colaboración y contribución conjunta, como