Derivado de la raíz latina soror, esta palabra refiere a la hermandad entre mujeres, de forma similar a palabras como “fraternidad”, la cual deriva de frater, formada con el mismo patrón de creación de palabras para el español. Considerada un neologismo, esta palabra la encontramos en la obra de Miguel de Unamuno, quien en 1921 hizo hincapie en la necesidad de un término que haga referencia a la hermandad entre mujeres.
Esto ha sido retomado en años recientes por grupos feministas como una solidaridad necesaria entre mujeres, especialmente en un contexto de desigualdad, y en oposición a la educación cultural en la que las mujeres compiten entre ellas. En 2018 la palabra fue añadida al diccionario de la Real Academia Española y ha extendido su uso.