El INEGI publicó los resultados del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) correspondientes a la primera quincena del mes de julio, estadística que da cuenta de la evolución del nivel general de precios en la economía mexicana, mejor conocido como inflación. De acuerdo con el índice, la inflación volvió a acelerarse durante la primera mitad de julio hasta una variación anual del 8.6% que se explica por el incremento de los precios en productos como la papa y los tubérculos, la cebolla, el huevo y la naranja.
El resultado de la primera mitad de julio es el más alto registrado desde la primera quincena de enero de 2001, cuando el índice registró una variación de 8.37% y representa la cuarta quincena consecutiva con incrementos. Al cierre del mes pasado, la inflación alcanzó un incremento del 8.09% y acumula 33 quincenas consecutivas fuera del rango objetivo establecido por el Banco de México (3.0% +/- 1 punto porcentual). Aunque el mercado había anticipado una nueva aceleración del nivel de precios, el resultado inflacionario superó en 0.5 puntos porcentuales el consenso del mercado (8.1%).
El índice de precios subyacente, aquel que excluye de su contabilidad los productos cuyos precios son altamente volátiles, creció hasta alcanzar una variación anual de 7.56%, su registro más alto desde la segunda quincena de diciembre del año 2000, cuando observó un aumento del 7.73%. De manera desglosada, el precio de los servicios creció 4.81%, mientras que las mercancías registraron un encarecimiento de 9.99%.
Por su parte, la balanza no subyacente, aquella que incluye en su contabilidad los productos cuyos precios son muy volátiles como los productos agrícolas o los combustibles, registró un incremento anual de 9.96%, su nivel más alto desde la primera quincena de enero de 2022. A su interior, el precio de los productos agropecuarios observaron un incremento de 16.76%, mientras que la de los energéticos y las tarifas autorizadas por el gobierno creció 4.78% respecto a la primera quincena de julio de 2021. De manera paralela, el índice de precios de la canasta de consumo mínimo subió 0.45% respecto a la quincena anterior y un 8.68% de forma anual.
Entre los productos que tuvieron mayor incidencia en el incremento inflacionario se encuentra la papa (6.82%), el huevo (6.28%), la naranja (6.04%), el transporte aéreo (6.03%), la cebolla (5.93%), los servicios turísticos en paquete (4.44%) y la electricidad (1.38%). Mientras que los productos cuyos precios disminuyeron y restaron presiones al índice fueron la uva (-11.21%), el chile poblano (5.45%) y el aguacate (-3.64%).