Parece que uno de los indicadores del comportamiento de la economía de México en el corto plazo está lanzando una primera señal de alerta. De acuerdo con los resultados del Indicador Oportuno de la Actividad Económica (IOAE), estadístico que el INEGI utiliza para anticipar la trayectoria del Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE), mismo que da cuenta de la evolución de la economía real mexicana en el corto plazo (algo similar al Producto Interno Bruto pero con una periodicidad mensual y no trimestral como el dato oficial), el IGAE observaría una contracción durante el mes de julio, lo que significa un tercer mes registrando resultados negativos de manera consecutiva.
Los datos del IOAE sugieren que el IGAE tendría una variación mensual del -0.13% durante el séptimo mes del año, después de que en mayo registrara una caída del 0.19% y en junio una adicional del -0.14%. Con dichos resultados, el índice general de la actividad económica se ubicaría en 0.63% debajo de sus niveles previos a la pandemia. Por grandes grupos de actividades, se estima una contracción mensual de las actividades secundarias (la industria) en un 0.2% durante julio, su primera disminución en los últimos cuatro meses; mientras que las actividades terciarias (el comercio y los servicios) se contraerían en un 0.1% respecto al mes anterior, tercer mes con bajas consecutivas.
En el comparativo anual, se prevé que la economía observe un incremento del 1.5%, impulsado por un avance del 2.7% en las actividades relacionadas a la industria mexicana y un 0.8% en los servicios y el comercio. El INEGI espera que el IGAE alcance un valor de 111.1 en el índice, compuesto por 101.2 puntos en las actividades secundarias y 115.8 en las actividades terciarias.
Analistas señalan que las implicaciones de este resultado son mixtas, aunque se confirma que la economía nacional ha perdido su momentum, el mes anterior se esperaba que la economía cayera en un 0.4%, ahora sólo es un 0.13%, por lo que parece que la perspectiva ha mejorado en un grado considerable. Para algunos, estos resultados parecen sorprendentes, lejos de ser desalentadores ya que la economía está retrocediendo pero no lo hace al ritmo que el mercado previamente estimaba que lo haría. El panorama hacia adelante sigue luciendo complicado y con los resultados recientes es muy probable que durante el tercer trimestre del año, el Producto Interno Bruto (PIB) de México registre una caída.
La quinta ola de contagios Covid-19 inició en julio, por lo que es uno de los factores que propiciaron la pérdida del impulso de la economía, lo mismo que los niveles inflacionarios.