¿AMLO quiere reelegirse?

¿AMLO podría reelegirse? A mucha gente pareciera no desagradarle la idea pero esto podría ser un error para la democracia mexicana.

 

ISAÍ GONZÁLEZ

 

El gobierno en turno planea reformar la Constitución Política de México con el fin de incluir la posibilidad de revocar el mandato presidencial después de un periodo de dos años de gobierno. Esto fue parte de la agenda política que Andrés Manuel López Obrador (AMLO) propuso desde que contendía por la presidencia de México, en la etapa de campaña. Aunque la intención agrada a la opinión pública, al menos en primera instancia, también les preocupa, a los críticos y a la oposición, que esta reforma represente la primera puerta abierta para la reelección del mandato presidencial. Básicamente, la oposición identifica 3 aspectos por lo que rechazan modificar la Constitución, pues consideran que amenaza la salud del sistema democrático de México.

 

El primer aspecto se refiere a que el presidente incurre como juez y parte, al ser él quien convoque a un ejercicio revocatorio. Como es el personaje central de la propuesta, prácticamente él definiría las reglas (mediante su mayoría en el congreso) de cómo habría de ser evaluado por la gente, lo cual es sumamente impropio. Además, al venir la propuesta de él, resulta en dividendos políticos a favor propio y de su partido, lo cual obviamente se reflejaría en las urnas.

 

El segundo punto, precisamente, habla de un sesgo importante a favor de Morena durante las elecciones. La consulta para la revocación de mandato plantea realizarse durante las elecciones intermedias, lo que resulta inequitativo, pues AMLO aparecería nuevamente en la boleta electoral, esto podría significar el logro de la mayoría absoluta en la cámara baja. Es decir, se abre la posibilidad de realizar una nueva campaña electoral, usando la imagen de López Obrador bajo el pretexto de “confirmar o revocar su mandato” y para ganar muchos más escaños en la Cámara de Diputados, lo que lascera aún más la ausencia de contrapesos de la escena política.

 

El último punto refiere a que la reforma prepara el camino para una eventual reelección al término del mandato. De antemano debemos decir que ninguna ley o reforma es retroactiva; esto significa que, de aprobarse, entraría en vigor hasta el siguiente periodo de gobierno, es decir, en 2024. Por lo tanto, es casi imposible que AMLO pudiera reelegirse, Morena tendría que casi deshacer la Constitución en esa materia para permitir una reelección presidencial. A pesar de ello y ante la paranoia desatada, López Obrador hizo pública una carta firmada por él mismo en la que se comprometía a no reelegirse.

 

La mayoría de los críticos afirman que la intención de López Obrador, al hacer todo esto, únicamente es favorecer a Monera en las elecciones intermedias. Yo no podría aventurarme a asegurar lo mismo, sería casi admitir que tengo la habilidad de conocer los pensamientos e intenciones de la mente humana. Por mi parte, quiero darle el beneficio de la duda al presidente y asumir que, efectivamente, su intención es dotar a la ciudadanía con la posibilidad de destituir al presidente en turno si no está conforme con su gestión y que no busca la reelección ni favorecer al partido político en el poder. No obstante, si esa fuese su verdadera intención, no cierra la posibilidad de que dicho sistema, en caso de ser aprobado, sea utilizado en el futuro a beneficio propio de los sucesores en el cargo una vez concluida la administración AMLO, resultando en un daño mayúsculo para la endeble democracia mexicana.

 

Como puede entreverse, siempre habrá espacio para manipular el sistema y poder corromperlo. El hecho de que AMLO firme una carta prometiendo no reelegirse no garantiza que los próximos presidentes no lo hagan.

 

Suscríbete para más artículos

Compartir en: